Que la banda asturiana ha tenido siempre arreglos orquestales es algo patente incluso desde aquel tratado de purismo powermetalero que era su debut epónimo. La delicada incorporación de los teclados, más allá de un mero acompañante ha sido una constante desde los tiempos de Ramil hasta nuestros días. También Santi Novoa, el actual tecladista, ya había hecho incursiones por el mundo clásico, coral polifónica… Por eso, la decisión de realizar un repertorio completo con orquesta sinfónica en el festival Leyendas del Rock del pasado año fue tomada como un acto valiente, pero también lógico, como un paso más en la dilatada y sólida carrera del grupo. Aquella experiencia había que repetirla, en casa, y así se hizo el 24 de septiembre pasado, ante un aguacero que no amilanó a sus miles de seguidores. Así son. Capaces de soportar un tromba de agua, de tirar por completo el servidor de la web antes de que saliera a la venta la edición de este trabajo y agotarlo en cuestión de horas. Y eso que no estamos ante un DVD o concierto completo. WarCry Symphonic se puso en circulación en plenas fechas navideñas, en formato digipack USB, con un atractivo diseño (tipo DVD, pero con tarjeta de 8GB tamaño carnet) y cuatro de las canciones que sonaron aquella noche. El póker en Full HD y dos de ellas en otra versión extra, 360º. A este material sonoro y audiovisual se le sumaban otros ‘extras’ como galería fotográfica y tarjeta descuento del 20% para pedidos posteriores en su tienda. Lo dicho, el producto se agotó en un suspiro… y hay motivos, aunque su visionado se hace muy corto, dejando una sensación acusada de ‘coitus interruptus’. Cuando uno piensa en banda de heavy con orquesta sinfónica, es imposible que no nos venga a la cabeza Deep Purple o el S&M de Metallica, para mí uno de los mejores directos que se han grabado en la historia del género. Grabado en la Plaza de la Catedral de Oviedo, Warcry se acompaña de la orquesta Oviedo Filarmonía que, bajo dirección de Miguel Navarro, arroparon al quinteto (ya saben, Víctor García –voz- , Pablo García –guitarra-, Roberto García –bajo-, Santi Novoa –teclados- y Rafael Yugueros –batería-) en una velada para la pequeña gran historia de nuestro Rock patrio. Las cuatro canciones elegidas compendian varias de las facetas de la banda. Por un lado, la potencia y contundencia en ‘Nuevo Mundo’, que excita en el acompañamiento sinfónico del fraseo y el puente, un medio tiempo compacto como ‘Cobarde’ y dos potentes baladas de dos épocas muy diferentes, la del debut ‘Cada Vez’, con esa desbordante y sincera declaración de amor parental y la emoción dolorosa, muy propia de sus canciones épicas, pero que se torna actual abordando la eutanasia en ‘El Amor De Una Madre’. A buen seguro, están muy lejos de ser las cuatro mejores canciones de Warcry (para alguno lo serán, sin duda), pero que dan testimonio de un proyecto que, opinión personal, debería haberse explotado más y, confieso, os aseguro que intenté hacer que hubiese otro concierto sinfónico el pasado año. Me faltó un último visto bueno para poder proponérselo al grupo. En cualquier caso, la bala queda en la recámara y la puerta está abierta para cuando quieran volver a este registro. Lo que sí tengo claro es que Warcry y los suyos pasan por ser la banda más constante de nuestro heavy metal y desde que me volaran la cabeza en 2002 con su debut y despacharan disco por año hasta 2006 están escritos con letras de oro entre mis favoritos. Después los tiempos se ralentizaron y el número de conciertos disminuyó para hacerse más selectivos (casi no tocan en salas), pero confiamos que con el lanzamiento de su noveno de estudio, que llevan un tiempo grabando, ‘el árbol se mueva’.
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